Aunque el cobre todavía mantiene una gran importancia en el mundo de la electricidad por su alta conductividad y su cómodo precio en el mercado, una investigación en Estados Unidos identificó a un nuevo y potencial contrincante entre los metales que podría reemplazarlo. Se trata del aluminio.
Investigadores del Pacific Northwest National Laboratory (PNNL), especialistas en ciencias de materiales, descubrieron que el aluminio no solo es más barato, sino también más ligero y abundante que el cobre, utilizado desde la electrónica hasta las redes de distribución de energía.
Con un costo tres veces menor que el del cobre, según datos actualizados de Statista, el aluminio ofrece una solución económica y viable para industrias que buscan reducir costos sin sacrificar calidad. Además, su abundancia en la corteza terrestre lo hace más accesible y sostenible a largo plazo.
A pesar de que el cobre ha sido preferido históricamente por su mayor conductividad, el aluminio posee ventajas significativas en términos de peso y versatilidad, debido a que, al ser 30% más liviano, se torna ideal para tecnologías en que el peso es un factor crucial, como en vehículos eléctricos y aeronaves.
Sin embargo, aunque todo suena color de rosa, el desafío principal de los científicos siempre ha sido mejorar la conductividad eléctrica del aluminio para que sea comparable con el principal metal conductor, ya que solo posee un 60%.
Fuente: La República